he nacido en los angeles rodeado del cariño de mis padres y en especial de mi querida abuela helen, como yo le solia decir, gracias a ella aprendi a dibujar y comencé a cantar. Hace unos años ella partio,dejandome un gran vacio y desesperación que se reflejaba en mi cara. Después de mucho tiempo llega mi mente a convencerse de que nos a abandonado para siempre, que su dulce voz no se escuchara jamas y que el brillo de sus ojos se extinguio.
Volvio a ser dispuesta mi salida para la universidad demorada antes por este desgraciado suceso.Aunque la pena me azotaba, no queria perder de vista a quienes me quedaban; por encima de todo queria ver consolado a mi querido hermano mikey.
Finalmente llego el momento de que partiera. Me deje caer en el coche que habria de conducirme, y quede sumido en los mas tristes pensamientos. Yo, que siempre estuve rodeado de mi amable familia, estaba entonces solo. Luego de mucho tiempo, por fin vi el alto campanario blanco de la ciudad. Descendi y me condujeron a mi habitación, para que pasara la tarde como quisiera.
A la mañana siguiente visite toda la universidad. La casualidad o tal vez la curiosidad me condujeron hacia una puerta, al final de un pasillo situada en el ultimo piso.al entrar observe un inmenso lienzo y al lado habia un pequeño chico, de limpidos ojos almendrados, sus labios y la forma de su rostro le daban una sensibilidad y dulzura tan expresivas que era imposible mirarlo sin ver en el un ser extraordinario, descendido del cielo y luciendo en sus rasgos un toque divino.
-ho..hola me llamo gerard way..-. solto el pincel y me tomo de la mano en gesto de saludo
-hola soy frank iero..eres nuevo no¿?-asenti con la cabeza- y..q te trae por aquí¿? Te gusta la pintura¿’-
-ayer llegue y quise conocer el lugar- le sonrei- siempre me intereso la pintura..que estas pintando¿?- me acerque a el, para quedar a solo centímetros de el.
-mira esto representa mi vida- me dijo indicandome con el pincel los garabatos que habia en el gastado lienso- según el profesor krempe, son un monton de garabatos..-su sonrisa desaparecio dandole paso a una mueca trantando de fingir ser la anterior sonrisa
-pintas muy bien- sin decirme palabra alguna agarro mi mano y en ella coloco un pincel.
-ayudame a terminarlo- m dijo sonriendo.
Estuvimos horas pintando hasta que la oscuridad me hizo saber que ya era hora de mi partida. Me despedi de el, prometiendole que volveria al dia siguiente para ayudarlo a terminar el cuadro. Me dirigi hacia mi habitación y al llegar me tire en la cama con la ropa puesta, cerre mis ojos, tan pronto su imagen vino a mi mente haciendo largar un suspiro. Abrace la almohada, imaginando que era el y cai rendido por el sueño..
Continuara!
